Sinestesia

Hace algunas semanas fuimos a cenar a un restaurante que ofrece 'experiencias sinestéticas'. Wikipedia (que es la fuente de la sabiduría universal) dice que sinestesia es "la asimilación conjunta o interferencia de varios tipos de sensaciones de diferentes sentidos en un mismo acto perceptivo". Es decir que es el arte de percibir algo con más de un sentido, por ejemplo "ver" diferentes colores cuando escuchas las notas musicales, o asociar sabores con los colores que ves.

Inspirados en este concepto, la cena buscaba que percibieras la comida con más de un sentido. El primer plato fue esta entrada con distintas cucharas, cada una tenía una "capsula gourmet" con un color diferente y te pedían que acomodaras las cucharas conforme a los colores que asociaras con los siguientes sabores: agrio, dulce, salado y amargo. Yo los acomodé así, pero cada quien tenía su propia teoría.

Muy interesante descubrir el sabor verdadero de cada cuchara versus lo que te esperabas. Luego te presentaban estos dos platillos y te decía que uno se llama Kiki y el otro Booba y tú tienes que decidir cuál es cuál. 

 ¿Qué opinan? Yo le puse Booba al de la izquierda y Kiki al de la derecha (lo cual es correcto porque casi todos asociamos el sonido y las letras de Kiki con líneas más cuadradas y duras, mientras que Booba es más redondo y suave).

Luego nos sirvieron este plato que mezclaba sabores salados con dulce. Cuando empezamos a comerlo, rociaron una esencia de tocino en el aire, y el platillo sabía súper saladito. Luego de un rato empezaron a rociar esencia de miel de maple y el mismo plato que antes te sabía salado, empezó a saber más dulce, Muy interesante!

El siguiente platillo venía envuelto en una bolsa de plástico y cuando lo abrías salía humo de leña. El olor era tan similar a la comida que se prepara con leña en los pueblitos mexicanos, que de inmediato me trasladó a Tres Marías de camino a Cuernavaca, yum!

Este platillo era muy sencillo, pero te lo servían junto con un dado en el que cada cara tenía una textura diferente (como lija, madera lisa, tela suave, etc) y te pedían que fueras sobando una cara diferente del dado cada vez que comías un nuevo bocado. Se supone que el cambio de textura, hacía que el platillo supiera diferente, pero a mí no me funcionó. De todos modos estaba muy bueno

El postre fue un gran algodón de azúcar con especias y luego diferentes postres que venían en una pirámide de vidrio.